En marzo del año pasado la Comisión
Teológica Internacional (CTI) presentó su documento sobre “La sinodalidad en la
vida y en la misión de la Iglesia”, aprobado por Francisco .
Y, de hecho, el
documento comienza citando al propio Francisco, pues su primer párrafo dice
así :

Esta
propuesta de Francisco, fundamentada teológica y pastoralmente por la CTI, es un punto de inflexión en la historia de la
Iglesia. Y por eso quiero poner el contexto del documento en este amplio marco de
la historia de la Iglesia. Para eso me serviré de algunas reflexiones del
teólogo y monje benedictino Ghislain Lafont en su libro sobre la historia de la
teología.[1] Veamos…
En los dos primeros siglos del cristianismo
‒primer período que tiene un valor modélico‒ vemos